Los inventos de Lacava: ni Transdraculas ni Dracutaxis resuelven el problema del transporte en Carabobo

 

El reloj marca las 4:30 de la tarde cuando Rebeca Romero comienza a preocuparse: lleva casi una hora en una parada en el municipio San Diego, estado Carabobo, esperando sin éxito un autobús con destino a Naguanagua. Para ella, ver el reloj y desesperarse por los pocos autobuses circulando, se convirtió en una escena recurrente al momento de regresar a su casa.





Por Corresponsalía

Romero, quien es profesora de baile, comentó que en horas de la mañana hay más unidades de transporte público en las calles, pero al caer la tarde la espera se acentúa, sobre todo para los pasajeros que se dirigen a los municipios de la Gran Valencia.

“Para el centro de Valencia y la avenida Bolívar es más fluido el transporte, pero ha disminuido mucho la cantidad de camionetas. Como a las 5:00 de la tarde todo se complica y uno se empieza a molestar, porque necesitamos llegar a tiempo al lugar a donde vamos”, expresó.

El secretario general del Sindicato Único de Transporte en Carabobo, Adolfo Alfonzo, informó que de 14.000 unidades que estaban activas en la entidad carabobeña para el año 2010, actualmente solo quedan operativas aproximadamente 5.000 de forma irregular.

Alfonzo aseguró que las ganancias que perciben no son suficientes para cubrir los gastos de mantenimiento, repuestos e insumos, por lo que algunos transportistas han optado por paralizar sus unidades, mientras otros venden los repuestos.

El precio del pasaje es de un bolívar digital, pero el gremio de transportista exige al régimen de Nicolás Maduro que sea ajustado a 0,30 centavos de dólar para poder costear los gastos operativos. Puntualizó que el precio de un caucho es de aproximadamente 250 dólares, mientras que un litro de lubricante se ubica en 5 dólares.

“Los transportistas estamos quebrados. Se cobra el pasaje en bolívares, pero pagamos los repuestos en dólares (…) Nosotros no percibimos un subsidio que permita mantener las unidades en buen estado”, manifestó el representante sindical.

Otra de las problemáticas que incide en la merma de unidades de transporte público en Carabobo es la escasez de gasolina. Denunció que a los transportistas les permiten equipar el tanque de sus vehículos cada 8 o 10 días en la E/S Big Low Center, una de las estaciones de servicio habilitadas para el sector transporte en Carabobo.

Además, manifestó que a pesar de que la capacidad de los tanques de las unidades oscila entre 100 y 200 litros, en ocasiones a los transportistas solo les despachan 70 litros de gasolina. “Con esto se pueden realizar dos viajes largos y después hay que parar la unidad hasta que le toque el turno, porque no somos atendidos en ningún otro expendio”, explicó.

Respecto a las unidades de transporte público que dependen del gasoil, Alfonzo señaló que están activos unos 2.800 vehículos.

“DracuTaxi” no resuelven

 

 

El 28 de octubre de 2021, el gobernador psuvista de Carabobo, Rafael Lacava, activó una nueva modalidad de transporte en el municipio Puerto Cabello, denominada “DracuTaxi”. Se trata de 40 unidades de mototaxi para paliar la crisis de transporte e impulsar el turismo en la ciudad costera.

Para el coordinador de la Cámara de Transporte Urbano y Suburbano de los municipios Puerto Cabello y Juan José Mora, Williams Fuentes, la incorporación de estas mototaxis de color rojo con el rotulado del vampiro de Drácula, con el que se identifica la administración de Lacava, no solventarán las fallas en el servicio de transporte público.

Precisó que para el año 2008 estaban operativas, al menos, 500 unidades de transporte público en la zona metropolitana de Puerto Cabello, pero actualmente la cifra se redujo a unas 100 unidades activas, debido a que los transportistas no tienen la capacidad de inversión para el mantenimiento.

Fuentes exhortó al gobernador reelecto recuperar los autobuses que permanecen inoperativos por falta de repuestos. “Nosotros estamos sobreviviendo en base al día a día, lo que ganamos no alcanza para costear todo y hemos tenido que paralizar las unidades”, expresó.

Repudió que el pasaje de transporte público se ubica en 1 bolívar digital, mientras que las Dracu Taxis que tienen capacidad de cuatro pasajeros cobren el pasaje en 2 bolívares digital.

La tragedia de ir a la playa

 

 

Pese a que Puerto Cabello es un municipio costero, el transporte público hacia las playas es una odisea. De acuerdo con datos de la Cámara de Transporte Urbano y Suburbano de los municipios Puerto Cabello y Juan José Mora, para en el eje playero solo tres unidades de transporte público están operativas.

Mireya Leal, habitante del sector Gañango, relató que para quienes no tienen vehículo particular, un viaje a la playa es sinónimo de aventura, debido a que el traslado hacia la costa es incierto.

“Aquí vienen los turistas para Patanemo, pero vienen en carros particulares. Aquí cuesta que pase un autobús, podemos pasar hasta tres horas esperando un carro que nos saque al centro de Puerto Cabello. Las mototaxis de Lacava no las he visto mucho”, señaló Mireya Leal, habitante de Gañango.

Durante la entrega de las 40 mototaxis, Lacava destacó que los “Dracu Taxi” es uno de los planes más ambiciosos en materia de transporte público. Promocionar la ciudad en materia turística, sitios de interés social y deportivo es uno de los principales objetivos. Manifestó en 2022 espera que Puerto Cabello sea uno de los destinos turísticos más relevantes del país.

“La entrega de estos 40 vehículos es el inicio de este plan, ya que partir del año que viene serán entregados 40 más para seguir mejorando toda la interconexión y logística que requiere una ciudad y un destino turístico como Puerto Cabello”, señaló.

El monto invertido en los “Dracu Taxi” es un misterio. Lacava no precisó cómo había adquirido estas unidades de transporte, ni cuánto invirtió en la compra.

A juicio de la diputada a la Asamblea Nacional legítima, Deyalitza Aray, el anuncio de Lacava de convertir a Puerto Cabello en uno de los principales destinos turísticos solo fue parte de sus promesas de cara a las elecciones del 21 de noviembre.

Denunció que en el municipio costero reinan las deficiencias en materia de servicios básicos y vialidad deteriorada en las distintas rutas del circuito turístico, como la vía hacia el Fortín Solano, Puente Los Españoles, casco histórico, sumado al trayecto para las playas Patanemo y Gañango, pero las autoridades regionales han hecho caso omiso a la problemática.

“Puerto Cabello es un municipio con una altísima vocación de turismo, pero que no ha sido atendido por el gobierno nacional, regional ni local. Esto fue un simple anuncio de campaña electoral que en nada beneficia a los porteños y, por el contrario, lejos de ser una ruta turística, estos vehículos (Dracu Taxi) están siendo utilizados para cubrir rutas de transporte público ante la ausencia y la crisis que atraviesan las unidades de transporte que hoy están ausentes en el municipio Puerto Cabello”, aseguró la parlamentaria Aray.

Transdráculas ausentes

 

 

El 18 de junio de 2018, el gobernador Rafael Lacava anunció, a través de un vídeo publicado en su cuenta en Twitter, que había adquirido 130 autobuses escolares usados provenientes de Estados Unidos para paliar la crisis de transporte en el estado.

En esa fecha, detalló que fueron 130 unidades de un total de 200. Dijo que con el monto necesario para comprar un colectivo nuevo, pudo adquirir 14 de estos autobuses colegiales amarillos – con una capacidad entre 50 y 60 puestos – que fueron rotulados con un murciélago negro para llamarlos “Transdrácula”.

El origen de los recursos para adquirir estos autobuses de segunda mano continúa siendo un enigma. El 25 de febrero de 2019, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, anunció nuevas sanciones contra dirigentes del chavismo, específicamente cuatro gobernadores, entre ellos Rafael Lacava.

Un día después, el 26 de febrero, el mandatario regional aseveró que las sanciones en su contra son una repuesta a la compra de los autobuses escolares norteamericanos que bautizó como Transdrácula. “Compré más de 300 autobuses, y lo hice escondido, por eso me sancionaron”, dijo en un acto en el Teatro Municipal de Valencia.

Gregorio Hernández todos los días utiliza el transporte público para movilizarse desde Naguanagua hasta su lugar de trabajo en el centro de Valencia. Comentó que son pocas las unidades Transdrácula que ha visto circulando en el último año.

“Cuando llegaron esas, siempre estaban full. Ni barandas tienen para uno agarrarse, pero nos teníamos que montar porque el transporte es rudo. Ahorita sí he visto algunas, pero muy pocas. Lo que más pasan son los autobuses rojos y las camionetas normales”, dijo.

Los Transdrácula se sumaron a la flota de transporte gubernamental TransCarabobo, que se creó en el gobierno de Francisco Ameliach en marzo de 2013, bajo la figura jurídica Justo Auto Carabobo C.A., con el objetivo de aliviar la movilización de los carabobeños mediante la adquisición de autobuses nuevos o usados, además de la capacidad de adquirir vehículos de carga pesada y liviana.

El 3 de noviembre el Ministerio del Poder Popular para el Transporte y Tránsito Terrestre del régimen de Nicolás Maduro entregó 86 unidades al sistema de transporte TransCarabobo: 56 nuevas y 30 reparadas.

“A partir de hoy entran en operaciones los autobuses que reforzarán todo el sistema de TransCarabobo y Transdrácula en 12 municipios de la región. Esto mejorará drásticamente el servicio de transporte público de nuestro amado estado”, escribió Lacava en su cuenta en Instagram.

El presidente del Sindicato Único de Transporte en Carabobo, Adolfo Alfonzo, consideró como positivo la incorporación de estas nuevas unidades. Sin embargo, exigió a las autoridades regionales atender la problemática de todo el gremio de transportistas.

“Estamos a favor de la llegada de estas unidades de TransCarabobo para que ellos observen lo difícil que es mantener una unidad (…) Para nosotros es difícil reparar una unidad que tenga daños mayores, porque no hay capacidad para los gastos de mantenimiento. Por eso la tendencia es que la cantidad de autobuses en las calles continúe bajando en la medida que se nos haga más difícil comprar los repuestos”, alertó.