¿Quién no ha sentido ira cuando escucha a cualquier vocero del régimen afirmando que el éxodo de venezolanos es inventado por la oposición, por el Grupo de Lima, por Almagro o por Trump?
La diáspora venezolana es una realidad tangible; la vemos en cada calle, en el metro, en el autobús, en las plazas, pero más aún, en nuestros hogares. Y es que esa cantidad de venezolanos que han huido de esta crisis, de este régimen, deja un vacío enorme en cada espacio de nuestras vidas. Y es que pareciera que el dolor de las madres, de los padres y de los amigos no existiera para Maduro y su gente, pareciera que ese dolor que sentimos les alimenta y les da fuerzas y que les envalentona; porque lo que vemos en los medios no libres, es una realidad distinta: todos ellos sonriendo, siendo felices, con seguridad, bien alimentados, con hijos asistiendo a clases y con certeza de tener un futuro prometedor y próspero.
Incluso, muchos de ellos haciendo vida artística, cantando y cumpliendo sus sueños, sí, como si el 87% de los venezolanos no estuviéramos pasando por la ruina que ha dejado el socialismo en estos 20 años. Lo hacen como si al llegar a casa y al hablar con tu mamá, ella no te mostrase su tristeza porque tu hermano o hermana le llamó por WhatsApp y no pudieron hablar bien porque no había buena señal. Incluso, al momento de escribir estas líneas, no puedo evitar pensar en mis hermanas que se vieron forzadas a emigrar por culpa de un régimen que destruyó futuros, separó familias y condenó vidas. Y es que justamente eso es lo que ellos han planificado: hacer que huya todo aquel que piense distinto; que todo aquel que busque libertad, se exilie; que todo aquel que tiene posibilidades, tenga que salir corriendo porque aquí solo caben aquellos que ellos quieren y logren dominar.
Ese es su plan: hacernos huir es su estrategia y la táctica la aplican a diario con el CLAP, con los controles, con la crisis de salud, con la falta de agua, con toda problemática que estamos padeciendo hoy día.
Pero uno de los errores que han cometido es que no contaban con la entereza de este país de hombres y mujeres valientes; no contaban con que a pesar de estar en esta crisis, los venezolanos nos levantamos y seguimos luchando para salir de ellos; nunca imaginaron que la única forma de que ellos puedan quedarse con el país es que acaben por exiliarnos a todos. Este es un país de gente noble y trabajadora, que ha cometido errores, que se ha equivocado, pero que ha aprendido de ellos. Venezuela sigue siendo una gran nación, porque cada uno de los que se ha ido, y de los que se ha quedado, tiene la firme convicción de que al salir de maduro y su régimen, hay un país que vamos a reconstruir.
Esa tristeza y ese dolor que sentimos quienes tenemos a alguien afuera solo podemos expresarlos quienes estamos viviendo esta triste realidad; eso ha de ser el motivo de muchos de nosotros para seguir trabajando día a día con todas nuestras fuerzas y todo nuestro amor para recuperar nuestra libertad, nuestra nación y con ella, a nuestros hermanos.
Hoy más que nunca: no te rindas. El futuro te pertenece.
@javier_chirinos