José Gato Briceño: CVG Alunasa-nepotismo e ineficiencia, cualidades revolucionarias

José Gato Briceño: CVG Alunasa-nepotismo e ineficiencia, cualidades revolucionarias

José "Gato" Briceño @josegbricenot
José “Gato” Briceño @josegbricenot

Definitivamente esta mezcla de riquezas naturales abundantes y Revolución Socialista (léase corrupción e ineficiencia) ha sido para Venezuela la fórmula letal para acabar con nuestros avances en explotación/producción, transformación y comercialización de miles de productos con calidad para cubrir nuestras necesidades y exportación en algunos casos. Estábamos en el rumbo hacia el crecimiento sustentable hasta que lamentablemente y sin pausa todo lo adelantado se estancó y lo que es peor, retrocedió hasta llegar al punto en el que estamos: cero producción.

Es el caso de CVG Alunasa (Aluminios Nacionales S.A.) empresa venezolana ubicada en Esparza a 92 km de San José, capital de Costa Rica., es la única empresa transformadora de aluminio en Centroamérica, se dedica a la manufactura y mercadeo de productos de aluminio laminados sin soportes, terminados y semi-terminados, a partir del lingote primario. Esta empresa, bajo la tutela de la CVG (su única accionista desde 1990), cuenta con amplia experiencia en la fabricación de foil industrial, discos, flejes, lámina rectangular y fin stock, utilizados para la elaboración de empaques flexibles y blister, moldes desechables, aislamientos térmicos y membranas impermeabilizantes.

En principio esta empresa Costarricense siempre necesito un proveedor y de allí se inicia la relación con Venezuela pues éramos productores de la materia prima hasta que en el gobierno de Carlos Andrés Pérez se adquieren todas las acciones para pasar de la simple explotación al área de productos terminados que fue una política de estado promovida por aquellos años.





Luego de un proceso de reorganización y reingeniería, CVG Alunasa aumentó su capacidad de producción a nueve mil 500 toneladas al año, incrementó en 10 por ciento la fabricación y ventas de “Especialidades”, en búsqueda de mayores márgenes de ganancia y diferenciación con la competencia. Al cierre del 2013, CVG Alunasa, no registró pérdidas, ni acumulaba pasivos laborales, subiendo sis ingresos subieron y su producción a 10 mil 535 toneladas de productos semielaborados y terminados de aluminio, según su Memoria y Cuenta.

Pero para desgracia de los pueblos de Venezuela y Costa Rica, desde el 17 de marzo del 2015 fue designado como Presidente de la empresa el General Noel Rafael Martínez Rivero, (alias Guasipati). Este personaje estuvo acusado de ser el autor intelectual del triple homicidio de los hermanos Faddoul (niños de 17, 13 y 12 años), siendo quien extorsionó al padre de los niños y como no pagó, los mandó a secuestrar y los asesinaron junto a su chofer. También fue fundador de los Círculos Bolivarianos, hoy denominados “Colectivos” que no son más que grupos paramilitares asesinos, dirigidos por el jefe del partido de gobierno (PSUV) y del Cartel del Sol, Diosdado Cabello. Con estas credenciales estamos claros en que este pillo cumplía con todos los requisitos revolucionarios para manejar recursos y llevar por el despeñadero a una empresa del estado.

En unas declaraciones dadas un año después de su fatídica entrada en la empresa, alias Guasipati dijo que “había recibido la empresa quebrada” aunque con eso dejara como malos administradores a sus amos de la revolución.

En esas declaraciones pinta su gerencia extraordinaria como excelente y eficiente en la que enumera logros económicos y sociales .Habla de que transformaba 1200 toneladas de aluminio mensuales pero lo cierto es que desde que asumió la presidencia de la CVG Alunasa, no rinde cuentas ni reporta ganancias al Estado Venezolano aunque se sabe que vende toda su producción en dólares y factura más de $4 millones mensuales en venta de productos semi-elaborados y terminados. De los 20 empleados venezolanos, el alias Guasipati tiene a más de 10 familiares trabajando en la empresa (la esposa, el cuñado, tres sobrinos, un sobrino de su esposa, el tío de la esposa, la cuñada y la esposa de un sobrino), 6 militares activos de la Fuerza Armada y hasta la niñera de la familia forman parte de la nómina que cobran sueldos ente 3.500 y 7.000 dólares mensuales dependiendo de los cargos que ocupan y algunos cobran también sueldos por el Ministerio de la Defensa. Su compadre Diosdado no le pide cuentas.

Tiene atributos adicionales, experto en sobornos, muestra de eso es que luego de una auditoría apareció en nómina la hija del auditor y como esa acción otras tantas como enlazar al hermano de una empleada como “asesor” y casualmente este asesor crea empresas asociadas al aluminio y negocian como proveedor con ALUNASA. Sin hablar de los lujos y excentricidades que a este delincuente le parecen detalles, regalos de sus allegados cómo llevar cantantes criollos, hacer fiestas de derroche sin precedentes, hasta una plaza con el nombre de Hugo Chávez construyó este desequilibrado mental.

Hoy en día a tres años de su nombramiento como presidente de dicha empresa de vemos cómo en medio del desastre administrativo, este delincuente la llevó a la ruina y esos días en los que ALUNASA reportó grandes ganancias al estado venezolano, están lejos con el agravante de que desgració la paz y la estabilidad a más 400 familias costarricenses que vivían de su trabajo en la empresa y a todo el pueblo venezolano. A los trabajadores los mandaron a quedarse en sus casas pues la industria entró en una crisis operativa y financiera que la hace inviable. El mayor temor de las familias de La Esperanza, quienes siempre han visto el manejo de alias Guasipati y recelaban de cómo manejaba la empresa, es que no se les cumpla con las garantías sociales exigidas por las leyes costarricenses y la verdad es que sin la materia prima proveniente de Venezuela, no hay producción pero la mala gerencia y el ladronismo revolucionario mantienen a la empresa al borde de la legalidad. Están reteniendo un ahorro laboral de los trabajadores equivalente al 2 % del salario sin respaldo legal; debe toda clase de obligaciones tributarias al gobierno de Costa Rica, además de un crédito de casi 3.000.000 de dólares al Banco Nacional de Costa Rica.

Como todo lo que toca el narcogobierno, CVG Alunasa está destruido y al servicio del terrorismo internacional pues desde allí se pagan a militares activos que cumplen órdenes directas de Diosdado Cabello de espiar algunos militares que estuvieron involucrados en el Golpe de Estado del 2002 contra Hugo Chávez y algunos civiles, entre los que figura mi persona a quien han tratado de secuestrar para hacer lo que ellos llaman justicia revolucionaria contra los disidentes. Su centro de operaciones está en Escazú y Santa Ana, pero aunque ellos tengan el control de mafias internacionales organizadas, saben que no se les va a hacer fácil evadir el estado de derecho y la ley que impera en Costa Rica.

Por donde se mire, se hace necesaria y urgente la salida de estás castas políticas criminales, es imperante que el compadrazgo que aplaude la ineficiencia a cambio de “lealtad” no continúe, que someten no solo al pueblo venezolano sino todo cuanto tocan. Por el bien de los venezolanos y de la humanidad la narcodictadura venezolana debe terminar y en ese sentido continuará mi incansable lucha.

Hoy en solidaridad con mi país de acogida, y lleno de vergüenza con las familias afectadas por este mal manejo de los recursos de todos los venezolanos, desde mi particular cárcel del exilio sigo dando la pelea y mostrando al mundo la verdadera cara de la Narcorevolucion del Siglo XXI, con lo único que me queda MI PLUMA y MI PALABRA.

José Gregorio Briceño Torrealba

“El Gato” Briceño

Twitter@josegbricenot