La fiscalía reclamó este lunes diez años de inhabilitación para cargos públicos para el expresidente de Cataluña, Artur Mas, que debe ser juzgado por desobediencia en la organización de una consulta prohibida sobre la independencia de esta región española.
AFP
En su escrito de calificación, al que tuvo acceso la AFP, los fiscales jefes de la región reclaman diez años de inhabilitación para Mas por delitos de desobediencia grave y prevaricación, y nueve años para dos miembros de su gobierno.
En su opinión, el expresidente catalán (2010-2016) “articuló una estrategia de desafío completo y efectivo a la suspensión acordada por el Tribunal Constitucional” de la consulta simbólica sobre la independencia celebrada el 9 de noviembre de 2014.
Desde 2012, el ejecutivo de Mas quería celebrar un referéndum de autodeterminación en esta rica región mediterránea que desde 2010 vivía un auge desenfrenado del independentismo.
Sin permiso del gobierno español, Mas decidió impulsar una votación simbólica sobre la independencia, organizada por voluntarios y sin los estándares democráticos necesarios, que sería prohibida por el Tribunal Constitucional pocos días antes de su celebración.
Aun así, su convocatoria se mantuvo y 2,3 millones de personas sobre un censo estimado de 6 fueron a votar, un 80% de ellos a favor de la independencia.
La votación provocó la apertura de una investigación del Tribunal Superior de Justicia regional sobre Mas, su vicepresidenta Joana Ortega y su responsable de Educación, Irene Rigau que están ahora pendientes de ser juzgados.
“Mas, amparado simplemente en su voluntad, que convirtió irrazonablemente en aparente fuente de normatividad, actuando con plena consciencia y voluntad, dejó de suspender oficialmente la convocatoria”, señalan los fiscales subrayando que los acusados sabían que desacataban la justicia.
Desde el independentismo se denuncia esta investigación como una causa política y un ataque a la libertad de expresión y participación de la sociedad catalana.
La petición se produce pocos días después de que el sucesor de Mas, Carles Puigdemont, haya anunciado que convocará con o sin el aval de Madrid un referéndum de autodeterminación en septiembre de 2017 para culminar el proceso de independencia iniciado en esta región hace un año después de que el independentismo se hiciera con la mayoría absoluta del parlamento regional.