Centro Latinoamericano Para la No Violencia condena detención de los trabajadores de 6to Poder (comunicado)

Centro Latinoamericano Para la No Violencia condena detención de los trabajadores de 6to Poder (comunicado)

EFE/Archivo
EFE/Archivo

Miguel Méndez Fabbiani, Defensor de Derechos Humanos del Centro Latinoamericano Para la No Violencia y miembro de la Red Internacional de Solidaridad con los Prisioneros Políticos Venezolanos, emitió un comunicado ante la detención de los trabajadores del Semanario 6to Poder.

Juan José Ojeda Díaz/Prensa de Solidaridad

A continuación el texto completo del comunicado:





Este 28 de Octubre de 2015 en la ciudad de Caracas, Expresamos nuestra más enérgica y contundente condena al encarcelamiento arbitrario de un grupo de humildes trabajadores del Semanario Sexto Poder. Estos ciudadanos que se encontraban protestando pacífica y cívicamente en las instalaciones de la Corporación Maneiro, ubicada en los Flores de Catia, fueron víctimas de tratos brutalmente y forzados a subirse a vehículos de la Guardia Nacional. De esta manera detenidos sin razón alguna por la fuerza fueron encarcelados como delincuentes comunes y pasados a fiscalía por la simple razón de protestar su derecho a comer. La corporación Maneiro es una instancia del estado con la única con potestad de expender el papel de los periódicos en Venezuela. La corporación Maneiro se ha abrogado el monopolio de vender papel solo a los medios de comunicación social que doblegan su línea editorial o le son complacientes al régimen actual.

Los que no acatan las ordenes de autocensura y amenazas constantes de altos funcionarios, son recortados en el suministro de las bobinas de papel y finalmente cerrados o clausurados por órdenes directas del Capitán Diosadado Cabello Rondón, quien sistemáticamente giro instrucciones para negarles papel y finalmente mando encarcelar a los trabajadores por que le vino en gana, por consiguiente les cegó el derecho a trabajar en paz y a alimentar a sus hijos.

Estos ciudadanos residentes en barriada muy humildes de la capital, quienes se encuentran en especial situación de vulnerabilidad por encontrárseles privados de su derecho constitucional a la libertad y al trabajo digno, fueron detenidos arbitraria e ilegalmente por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, provenientes del Destacamento 434, haciendo caso omiso a lo ordenado por la Comisión interamericana de DDHH que dicto medidas cautelares de protección y específicamente al semanario Sexto poder, al Editor y a sus trabajadores.

Desde el CELANV Capitulo Venezuela exigimos una vez más se establezcan los mecanismos que permitan el reconocimiento de la dignidad de los trabajadores y de las familias que de ellos dependen.

Asimismo, repudiamos taxativamente este tipo de acciones violentas por parte de los cuerpos represivos del régimen, encarcelando a la fuerza al señor padre del Editor del semanario Sexto Poder, un adulto mayor que requiere de suministro regular de sus medicinas y cuidados especiales. Esta feroz arremetida contra la libertad de expresión deja al descubierto la inexistente voluntad del régimen de respetarles su medio de vida y su derecho a existir.

Entendemos que este tipo de acciones buscan criminalizar a la prensa libre, al movimiento democrático, al pensamiento crítico y a los medios alternativos de comunicación, lo cual resulta más que preocupante ya que deja en evidencia el doble discurso de un gobierno que desde que llegó al poder tiene prisioneros políticos, desaparecidos y asesinados. Esta cruda realidad se ha convertido en una práctica sistemática para desaparecer las críticas y contribuciones que ha bien debe realizar la colectividad en aras de permitir el libre juego democrático y la libre dispersión de las ideas.

Exigimos categóricamente la inmediata y plena libertad de todos estos padres de familia y detenidos en el día de ayer y el respeto pleno a sus derechos humanos y judiciales.

Desde el Centro Latinoamericano Para La NO violencia declaramos nuestra solidaridad efectiva con los prisioneros de opinión que desde hace días ejercitaban su derecho a que les vendieran unas bobinas de papel para poder llevar el pan a sus hijos.

Ayer nos presentamos sin temor alguno y plantándole cara al oprobio en el Destacamento 434, a fin de reclamar el respeto a sus derechos humanos y la libertad de quienes fueron arrestados sin causa alguna. Allí con la fuerza de la verdad y con limpieza de consciencia, exigimos enérgicamente, como es nuestro deber, el respeto de sus derechos inherentes a la condición humana.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos condena desde hace años mediante las resoluciones de sus relatorías, estos hechos francamente violatorios de los derechos primigenios de la población venezolana, consagrados en la Declaración Americana de los Derechos y los Deberes del Hombre, de la cual Venezuela es firmante y obligada a respetarla, en particular el derecho a la libertad de expresión y los derechos de justicia; de sufragio y participación en el gobierno; reunión; asociación; petición; protección contra la detención arbitraria y derecho a un debido proceso.

La CIDH reitera que las restricciones a los derechos políticos, a la libertad de expresión y de difusión del pensamiento, la falta de independencia del poder judicial y las restricciones al derecho de tránsito, configuran una situación permanente de trasgresión de los derechos humanos fundamentales de sus ciudadanos e insta al Estado a realizar las reformas necesarias conforme a sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.

La Comisión Interamericana insta al Estado Venezolano a adecuar sus normas procesales a los estándares internacionales aplicables en materia de debido proceso, a fin de que las personas que acudan a los tribunales para la determinación de sus derechos y responsabilidades cuenten con garantías legales mínimas para ejercer sus medios de defensa.

Asimismo, la Comisión insta al Estado Venezolano a adoptar las medidas que sean necesarias para prevenir y erradicar las distintas formas de hostigamiento contra quienes ejercen el derecho de protesta pacífica.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.

En el Centro Latinoamericano Para La NO Violencia: Iniciara la redacción de un informe especial al Sr. Frank La Rue, Relator Especial sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión; el CELANV Capitulo Venezuela le remitirá dicho informe a la Sr. Maina Kiai, Relator Especial sobre el derecho a la libertad de reunión y asociación pacíficas; al Sr. Mads Andenas, Grupo de Trabajo sobre la detención arbitraria; Sr. Juan Méndez, Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas cueles, inhumanos o degradantes; y con copioa a la Sra. Margaret Sekaggya, Relatora especial sobre la situación de los defensores de los derechos humanos.

Los expertos en derechos humanos de la ONU forman parte de lo que se conoce como los Procedimientos Especiales del Consejo de Derechos Humanos. Procedimientos Especiales, el mayor cuerpo de expertos independientes del Sistema de Derechos Humanos de la ONU, es el nombre general de los mecanismos de investigación y supervisión del Consejo de Derechos Humanos que se concentran en la situación de países específicos o en áreas temáticas en todo el mundo. Su labor, asignada por el Consejo de Derechos Humanos, es monitorear, informar y asesorar sobre temas de derechos humanos.

Los expertos de Procedimientos Especiales trabajan como voluntarios; no son personal de la ONU y no son remunerados por su trabajo. Son independientes de todo gobierno u organización y se desempeñan en su capacidad personal.

La cadena de detenciones arbitrarias, claramente señaladas como persecución política son una demostración más de la forma como el gobierno Venezolano intenta distorsionar el proceso democrático de solución pacifica recortando de facto las libertades ciudadanas.

Las acusaciones farisaicas y la detención injusta del Editor del semanario Sexto Poder Sr. Leocenis García, el allanamiento agresivo del semanario en dos oportunidades y ahora el encarcelamiento arbitrario de sus trabajadores, se perfilan en la misma línea de las detenciones dirigidas a contener una creciente desafección y rechazo al régimen militarista que desgobierna Venezuela.

La forma que asume la represión desde el régimen es la búsqueda de imponer por la fuerza el aconductamiento y la sumisión de la ciudadanía. Así se ha visto en el caso de estos sencillos y honestos trabajadores de 15 y último, en su oposición a servir de intérpretes de la injusticia cometida contra su institución de trabajo.

El régimen de manera atrabiliaria y consciente ampara la vejación de estos dignos representantes del pueblo venezolano y por consiguiente la impunidad en la violación de los derechos humanos y las garantías democráticas de los mismos.

EL CELANV llama a la opinión pública a expresar su rechazo a estos procedimientos que pretenden proyectar el tratamiento de guerra al pueblo, escamoteando el espíritu democrático de una solución política para la paz en las venideras elecciones. Ante la arbitrariedad solo cabe la respuesta unida, el pronunciamiento de todas las organizaciones de DDHH, las movilizaciones y protesta contra el ambiente turbio con que pretenden ahora los dueños del dinero del pueblo y del poder del pueblo silenciar a este mismo pueblo.

EL CELANV exige el cumplimiento del debido proceso, el derecho de defensa, la reparación del buen nombre de los falsamente inculpados. Reclamamos su inmediata libertad y la plenitud de garantías constitucionales.

Así mismo nos permitimos recordarles a los que hoy se jactan a mandíbula batiente de violadores de derechos humanos, que el largo brazo de la justicia internacional les alcanzara sin lugar a dudas y que estos crímenes los realizan a sabiendas de que los mismos NO prescriben jamás y más temprano que tarde serán debidamente enjuiciados, encarcelados y condenados con largas penas de presidio por ellos.


LIC. MIGUEL MENDEZ FABBIANI

Defensor de Derechos Humanos del Centro Latinoamericano Para La NO Violencia