Pedro Vicente Castro Guillen: Las elecciones parlamentarias

Pedro Vicente Castro Guillen: Las elecciones parlamentarias

thumbnailcolaboradores-190x1301La Presidente del CNE convocó las elecciones parlamentarias para el 6 de diciembre. Este anuncio significa abrir una compuerta para aliviar la inmensa presión que la crisis global crea sobre la sociedad venezolana. Es una elección parlamentaria que va a tener una significación muy especial porque ella genera expectativas que ninguna otra elección de este tipo ha generado en el pasado. Sobre ella y su resultado se espera que produzca un cambio en la actual deriva hacia el caos general.

En verdad, estas elecciones se producen en las condiciones más difíciles que haya vivido la República en toda su historia reciente. Tenemos una situación de grave crisis económica, con la única economía petrolera en la historia mundial que exhibe un comportamiento hiperinflacionario, se espera que este año las cifras de inflación cierren entre 120% y 170%, de acuerdo a algunas estimaciones entre ellas las del Bank Of América, banco asesor del gobierno, una caída general del producto del orden del 7% de acuerdo al FMI, y lo más grave e insólito la destrucción de nuestra emblemática industria petrolera PDVSA, que representa el 96% del ingreso de divisas.

Todo esto ha conducido a un cuadro social muy grave, con un aumento rápido y desproporcionado de la pobreza que hoy exhibe niveles superiores a los del año 1998, por el orden del 55%, lo que genera una desigualdad social escalofriante, el flagelo del hambre vuelve azotar a amplios sectores de la población.





Pero lo más espantoso es la elevación desproporcionada y catastrófica de los niveles de violencia que ha llevado a que en 16 años la cosecha de muertes por asesinatos sobrepase los 231.000 homicidios y en 2014 hayan sido alrededor de un poco más de 14.000; con niveles de impunidad que arrojan la cifra record del 97%.

A este cuadro de descalabro económico y social se une un factor enervante y que genera altos niveles de crispación política, y esta dado por el hecho de que a la muerte del Presidente Chávez, se rompe la unidad de mando y el ejecutivo queda dividido en al menos dos fracciones del chavismo, lo que ha contribuido al aumento de la deriva autoritaria y a la implosión de la situación económica y social del país.

Es todo el cuadro anterior lo que hace que las expectativas sobre estas elecciones sean tan elevadas, porque la población y en este caso mayoritaria de opositores y chavistas esperan que se produzca un giro en la situación actual. En nuestra opinión para que estas elecciones puedan responder a tales expectativas, su resultado debe contribuir a la formación de una nueva mayoría que incluya sectores de la oposición y del chavismo, que puedan  efectivamente presentar salidas NEGOCIADAS, es decir realista, que permitan producir un cambio garantizando un mínimo de estabilidad, con el fin de recuperar algunos equilibrios institucionales, reorientar el rumbo de la economía para la recuperación del aparato productivo nacional y controlar el incremento de la pobreza, también que pueda generarse una política para el control de los grupos violentos, las bandas delictivas y bajar los niveles de impunidad.

Dr. Pedro Vicente Castro Guillen                                                                @pedrovcastrog