Los estudios de opinión o barómetros de opinión, son encuestas de escalas de actitud de carácter constante: mensual o anual, con deliberes sociológicas, políticas y económicas. Las encuestas o sondeos de opinión: Los especialistas aseguran “son un instrumento de ayuda para la comprensión de la realidad electoral, económica y social, son un instrumento científico útil para entender las tendencias profundas acerca de los temas que son y serán claves en el debate político y sirven para fijar la agenda política, pero las encuestas no son ningún sustituto de la propia realidad”. En síntesis, las encuestas son como los planos de carreteras: no nos dicen a donde ir, pero si nos indican la mejor manera para llegar a donde quiero ir.
Emergen diversos estudios de opinión en Venezuela, en un momento histórico signado por una crisis, no pasa un día sin que aparezcan nuevas mediciones de opinión que arrojan resultados completamente disparejos, intencionados. En este debate frecuente sobre las encuestas siempre se consideran pocas empresas confiables que se ocupan de medir la opinión pública.
Una investigación de opinión pública es un instrumento ventajoso y necesario no solo para el diseño de las estrategias de una campaña electoral, sino para buscar salidas a una crisis económica o social, no obstante, esta herramienta tiene una vertiente que puede ser utilizada para encausar un “efecto encuesta” que son aquellas encuestasforjados para generar “mentiras verdaderas” o un triunfo psicológico.
El problema que plantean las encuestas, muchas veces es su falta de credibilidad. Claro está que hay que tener en cuenta el arte de observar, analizar, interpretar y comprender los datos, lo que llamamos nosotros la hermenéutica electoral. Permítanme afirmar que a pesar de la manipulación de alguna de ellas, como norma general, las encuestas no mienten. Se debe aprender a tener comprensión de estos instrumentos. Todas ellas dan luces.
Si analizamos el contexto Venezolano, la mayoría de las encuestas reflejan Nicolás Maduro parece estar perdiendo aceleradamente su capital político que heredó del fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez, la gente lo percibe que es incapaz de enfrentar los graves problemas políticos, económicos y sociales que enfrenta el país.Esta percepción es grave, es vinculante a la confianza en su gestión, rápidamente podemos preguntarnos, una gestión de gobierno con indicadores en su contra, podrá tener la fortaleza necesaria para llegar al 2019? Difícilmente, los dilemas serán muchos.
Nuestros estudios no favorecen al régimen, mientras otras empresas (pro gobierno) si loayudan,pero en la esencia de los diferentes resultados, todos, coinciden en que la oposición es la mayor fuerza política del país y que el respaldo popular del Chavismo –Madurista se mueve entre 35% -40%. Además, es relevante comprender que los últimos resultados arrojados por encuestadoras todas llegan a una conclusión, la oposición derrotaría a Maduro por un cómodabrecha en una nueva elección, siempre y cuando hablemos de nuevos Rectores y depuración RE, otros de los datos significativos para el análisis, según nuestros análisis integrales, preponderanque la gestión de Maduro, el 70% la considera que es “regular”, “mala” o “muy mala” y solo 25% opina que es “buena” o “muy buena”.Evidentemente, Maduro se encuentra atrapado en su propio laberinto. La lógica dice que debería ser más racional en sus decisiones y gritar con discreción por ayuda. Pero Maduro, hace es todo lo contrario, vive desafiando al pueblo, al mundo, a la historia, las leyes, esta develado que se apoya estratégicamente en el poder de las instituciones del Estado para aferrarse al poder.
Haciendo una abstracción final de nuestros estudios de opinión y otras investigaciones, las derivaciones hacen que llegamos a conclusiones Nicolás perdió la calle, perdió la magia que los atornillo durante 14 años en el poder, emergió el desamor hacia un proyecto político que ilusiono pero no concreto los sueños de los que aspiraban un mejor país, es casi imposible llegar al final de una gestión con una opinión nacional en contra, el tiempo se le agoto a la revolución. Roja Rojita.
María Corina Machado, seguirá siendo diputada, la eligió el pueblo y sus electores se deben respetar… Con la decisión del TSJ, el régimen termina de bajar la santa maría” – aún falta ponerle los candados – al dialogo, se mantendrá el monologo, seguramente. Textualmente cierro este artículo con un análisis que tome de una noticia… “Determina la sentencia que las incompatibilidades para los diputados y diputadas de la Asamblea Nacional, tienen como finalidad evitar actuaciones contrarias a la ética y a los principios de soberanía, independencia, autodeterminación, responsabilidad social, paz internacional, justicia, entre otros, por ser éstos, base fundamental del Estado venezolano”… Lo cierto es que las leyes en este país solo aplican para los opositores.
Director de la consultora Hercon
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