Luis Prieto Oliveira: Contar con la memoria

Luis Prieto Oliveira: Contar con la memoria

El sedicente fue al Capitolio a presentar lo que él llama Memoria y Cuenta, que parece ser que Cuenta con la mala memoria de los venezolanos, que seguramente no se acordarán, en unos cuantos días, de la sarta de mentiras que hiló el que se dice mandatario, aunque desde el punto de vista jurídico, para ejercer tal función, es necesario recibir un mandato de quien está autorizado para hacerlo.

La Constitución nos dice que “la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce…indirectamente mediante el sufragio”, sin embargo, no existen pruebas fehacientes de que los sufragios hayan favorecido a quien, basado en el control absoluto que ejerce sobre los poderes del estado, logró ser proclamado, aún cuando existían denuncias bien fundadas de que se produjo un fraude de tal magnitud, que hace dudar de las cifras publicadas por el CNE.

Estamos cansados de canciones de cansada jerga revolucionaria, que se traducen en más escasez, más inflación, más violencia, peores servicios públicos y un deterioro institucional y de la estructura productiva, que ya nos ponen en la cola de las naciones de este hemisferio.





Presentar un mensaje tan lleno de falsedades y de frases hechas, en medio de la más profunda crisis que ha vivido el país en su historia, es un atrevimiento de una magnitud estratosférica. Y venir ahora, cuando la política económica y fiscal del país ha colapsado y ya no tiene un solo hueso sano, que van a mantenerse las líneas centrales del desastre, es una locura digna de una camisa de fuerza de tamaño familiar.

No adelantar remedios para la escasez atrofiante que vivimos, no corregir la política cambiaria y hacer oídos sordos a los sonidos de la calle, denota un afán suicida que, aún sus más declarados enemigos, demuestra una total insania. Decir que la situación venezolana está mejorando cuando 30 de los más importantes diarios del país están al borde del cierre por falta de papel para imprimir sus ediciones, cuando la principal empresa de suministro de alimentos nacionales, plantea que ya no es viable seguir produciendo, porque no recibe los dólares necesarios para cubrir sus compromisos con sus proveedores externos, mostrar una cara de supuesto optimismo cuando 40% de los equipos médicos, indispensables para atender la salud de los venezolanos, están inutilizados por falta de dólares para comprar los repuestos y tampoco existen fondos para cubrir el costo de los insumos, cuando el año cerró con una inflación superior a 80% en los alimentos, lo que implica que, los más pobres, que gastan casi las dos terceras pases de su ingreso en comer, ahora están 50% peor que el año antepasado.

Viva la mala memoria de nuestros gobernantes, que subsisten y medran (y como medran), porque no se dan cuenta de que la correa ya ha llegado al límite de los huecos y ya no hay más que apretar. Los romanos inventaron la política de pan y circo, pero a este señor los payasos le salen de luto y erl pan, desde hace tiempo es un producto para el recuerdo doloroso.

Ese es el mensaje y esa es la esperanza. Sangre, que abunda en todas nuestras calles y nos han convertido en un país de víctimas, sudor, el que baña a los que deben hacer colas interminables a pleno sol y lágrimas, las de las madres que no tienen como alimentar a sus hijos. Churchill pudo prometer esa tres cosas, porque estaba enfrentado a la invasión de unos bárbaros. Hoy el aliado de los invasores está en Miraflores y se dedica a ayudarlos en el saqueo de todas nuestras riquezas.
Es el reino de la paradoja y del retruécano. Es el país de birlibirloque. Es la tierra donde la leche se la traga la tierra y las abejas se han declarado en huelga, porque las únicas flores rubicundas son las de la familia de la Primera Combatiente.